Estamos de celebración, aunque todavía queda mucho por hacer. El presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, ha firmado la ley que considera delito la mutilación genital femenina, una práctica a la que se cree han sido sometidas la asombrosa cifra de 19,9 millones de mujeres nigerianas.
La mutilación genital femenina o circuncisión femenina, es un procedimiento en el cual la totalidad o la mayor parte de los genitales externos femeninos son removidos o alterados quirúrgicamente por razones no médicas. Esta práctica no aporta ningún beneficio a la salud de las mujeres y niñas, más bien todo lo contrario, puede producir hemorragias graves y problemas urinarios, además de quistes, infecciones, infertilidad y complicaciones de parto. Muchas mujeres mueren en el procedimiento, ya que este suele ser rudimentario con herramientas como cristales, cuchillos o cuchillas de afeitar contaminadas. La Organización Mundial de la Salud, consideran que realizarlo es una violación de los derechos humanos de las niñas y mujeres.
Nigeria ha hecho historia y servirá de ejemplo para otros países. Es muy importante cambiar visiones culturales tradicionales que respaldan la violencia contra las mujeres.